Respuesta rápida: Puedes llevar insulina y agujas en el avión, incluso si superan los 100 ml. Llévalas siempre en el equipaje de mano, protegidas en una nevera portátil aprobada. Un justificante médico y si viajas internacional una receta puede ayudarte en los controles.

Viajar con insulina en avión por primera vez puede generar dudas: ¿te dejarán pasar con las jeringas?, ¿cómo mantener la insulina fría?, ¿afecta el vuelo a tus niveles de glucosa?, ¿y qué pasa con los escáneres de seguridad?

Pero no te preocupes, estás en el lugar adecuado. En este artículo te explicamos cómo viajar en avión con insulina desde o dentro de España, qué dice la normativa de AENA (Aeropuertos Españoles y Navegación Aérea), y qué tipo de neveras portátiles puedes llevar para mantener tu medicamento en condiciones seguras durante todo el trayecto.

Así que abróchate el cinturón y prepárate para despegar con tranquilidad y confianza.

4AllFamily España - nevera para insulina portátil

Te puede interesar: Cómo conservar y transportar insulina en un viaje: guía completa para personas con diabetes que viajan con suministros de insulina

¿Se puede viajar con insulina en el avión?

Empezamos con lo mas importante: sí, se puede viajar con insulina en avión. AENA (Aeropuertos Españoles y Navegación Aérea) y la normativa de seguridad de la Unión Europea permiten llevar insulina y otros medicamentos esenciales en el equipaje de mano. Esta normativa se aplica tanto a vuelos nacionales como internacionales, incluidos los que tienen origen o destino fuera de España.

Puedes llevar contigo:

  • Viales de insulina
  • Plumas precargadas
  • Cartuchos de recambio
  • Jeringas, agujas, sensores, bombas de insulina y otros dispositivos médicos

Además, se permite transportar cantidades superiores a los 100 ml, siempre que estén justificadas como parte de un tratamiento médico.

Muy importante: Nunca factures tu insulina. Las bodegas de los aviones no están climatizadas de forma adecuada y pueden sufrir temperaturas extremas que deterioran la insulina. Llévala siempre contigo en cabina, bien protegida y almacenada en una nevera portátil para insulina. Y ojo: asegúrate de que sea apta para volar, idealmente homologada para transporte aéreo, para evitar problemas en los controles de seguridad o en el embarque.

¿Puedo llevar agujas y jeringas de insulina en el avión?

Puedes llevar contigo agujas, jeringas, lancetas y dispositivos de punción, tanto nuevos como usados, siempre que estén relacionados con tu tratamiento médico para la diabetes. Estos materiales están permitidos en el equipaje de mano según la normativa de AENA.

Ten en cuenta lo siguiente:

  • Agujas y jeringas nuevas: deben transportarse junto con la insulina correspondiente. Es decir, no se permite llevarlas por separado si no están vinculadas a un medicamento específico.
  • Agujas usadas: deben ir en un recipiente rígido y seguro, como un bote de plástico resistente o un contenedor para agujas usadas, para evitar cualquier riesgo de pinchazo o accidente durante el vuelo.
  • En el control de seguridad, informa al personal de que llevas material médico. Puedes solicitar una inspección visual manual en lugar de que pase por el escáner, si así lo prefieres.

Llevar los dispositivos bien organizados en un estuche transparente y separado del resto del equipaje puede facilitar mucho el proceso de revisión en los aeropuertos.

Qué accesorios y suministros para diabeticos se pueden llevar en el avión

Puedes llevar en tu equipaje de mano todos los materiales necesarios para tu tratamiento:

  • Insulina en viales, plumas, cartuchos o jeringas listas para usar
  • Agujas, jeringas y lancetas
  • Medidores de glucosa y tiras reactivas
  • Sensor de glucosa
  • Bombas de insulina y kits de infusión
  • Glucagón u otros kits de emergencia
  • Zumos, geles de glucosa u otros productos para hipoglucemia

Te puede interesar: ¿Cómo viajar con insulina? Consejos para empacarla de forma segura y eficaz

Cómo llevar insulina en el avión de forma segura

Llevar insulina en un vuelo requiere algo más que simplemente meterla en la mochila. Para conservar su eficacia, evitar problemas en los controles y viajar con tranquilidad, es importante seguir unas reglas básicas de preparación y transporte.

Empaque y organización

Lleva siempre la insulina en tu equipaje de mano, nunca en la maleta facturada, ya que la bodega del avión puede sufrir temperaturas extremas, tanto de frío como de calor, que pueden alterar la eficacia del medicamento y se pone malo. La insulina es sensible y debe mantenerse dentro de un rango de temperatura seguro durante todo el trayecto.

Guarda todos los medicamentos y dispositivos en un estuche térmico o nevera portátil homologada para transporte aéreo.

Entre las opciones más recomendadas por viajeros desde España están:

Además, utiliza un recipiente transparente, hermético y organizado para guardar todo el material médico: insulina, jeringas, sensores, documentación, etc. Esto facilita el paso por el control de seguridad y evita tener que desempacar todo frente al personal del aeropuerto.

¿Cuánta insulina llevar?

Calcula la cantidad de insulina que necesitarás durante todo el viaje y añade una pequeña reserva extra por si surgen retrasos, pérdida de equipaje o cambios de itinerario. Como norma general:

  • Lleva al menos el doble de insulina y consumibles que usarías en el tiempo previsto de viaje.
  • Divide el material en dos bolsas independientes, por si una se pierde o sufre algún daño.

Informe médico para volar con insulina y agujas

Aunque dentro de la Unión Europea no es obligatorio presentar una receta o justificante médico para transportar insulina y material asociado, sí es altamente recomendable llevarlos siempre contigo, especialmente si el personal de seguridad requiere una verificación rápida.

En el caso de vuelos internacionales fuera de la UE, como por ejemplo hacia Estados Unidos, Latinoamérica, Asia o África, puede ser obligatorio presentar:

  • Una copia de la receta médica (preferiblemente en inglés).
  • Un informe o carta médica que acredite tu condición y la necesidad de llevar insulina y dispositivos asociados.
  • La documentación del dispositivo si viajas con bomba de insulina o sensor de glucosa.

Si viajas a Estados Unidos, puedes descargar y completar la tarjeta de notificación médica de la TSA, que ayuda a informar discretamente al personal de seguridad sobre tu tratamiento sin necesidad de explicaciones verbales.

Consejo útil: consulta con la embajada o consulado del país de destino si existe algún requisito específico para entrar con medicamentos. Algunos países solicitan una declaración previa o autorización sanitaria para el ingreso de fármacos, aunque sean para uso personal.

Viajar con insulina en vuelos internacionales

Si viajas fuera de la Unión Europea, es importante que te informes bien sobre las normas del país de destino respecto a la entrada de medicamentos como la insulina y sus dispositivos asociados.

Algunos países pueden aplicar restricciones incluso a medicamentos personales, por lo que conviene tomar precauciones antes del viaje.

Recomendaciones prácticas si viajas fuera de la UE:

  • Consulta con la embajada o consulado del país al que te diriges para conocer posibles requisitos sanitarios.
  • Lleva insulina solo para uso personal, bien etiquetada y en cantidades justificables para la duración del viaje.
  • Transporta la insulina de forma segura y refrigerada, preferiblemente en una nevera portátil aprobada para vuelo.
  • Evita facturar insulina: llévala siempre en el equipaje de mano.
  • Divide tu insulina en diferentes bolsas de mano si llevas varios viales o plumas, como precaución ante pérdidas o retrasos.

En la mayoría de los casos, no tendrás problemas si cumples estas recomendaciones básicas. Prepararte con antelación te permitirá pasar los controles sin contratiempos y centrarte en disfrutar del viaje.

Te puede interesar: Neveras y Bolsas Térmicas para Transportar Insulina: ¿Cuál Elegir?

4AllFamily España - bolsa nevera para medicamentos

Cómo mantener la insulina fría en el avión

Conservar la insulina a la temperatura adecuada durante un vuelo es esencial para que no pierda su eficacia. Tanto el calor excesivo como el frío extremo pueden deteriorarla. Por eso, es importante saber qué tipo de insulina estás transportando y qué sistema de refrigeración necesitas según el destino, la duración del vuelo y la estación del año.

Aquí tienes las recomendaciones básicas:

  • Insulina sin abrir: debe mantenerse entre 2 °C y 8 °C. Utiliza una nevera portátil homologada que garantice esa temperatura durante todo el trayecto.
  • Insulina abierta: puede conservarse a temperatura ambiente (hasta 25 °C) durante un máximo de 28 días. Aun así, si viajas a zonas calurosas o durante el verano, es recomendable usar un sistema de refrigeración para evitar que se caliente en exceso.

Refrigeradores de viaje y neveras portátiles

Asegúrate de que tu estuche térmico o mini nevera portátil esté aprobado para transporte aéreo. Puedes optar por:

  • Modelos sin electricidad: funcionan con gel refrigerante o tecnología de evaporación.
  • Modelos con alimentación USB: útiles para vuelos largos o conexiones, ya que mantienen la temperatura durante más tiempo.

Según el tipo de insulina que utilices y la temperatura a la que deba almacenarse, puedes elegir entre varias opciones de transporte seguro.

La marca 4AllFamily, especializada en soluciones para personas con diabetes, ofrece una amplia gama de neveras portátiles y estuches térmicos diseñados específicamente para viajar con insulina de forma segura, tanto si debe ir refrigerada como si solo necesita mantenerse fresca.

Neveras y refrigeradores que mantienen la insulina entre 2 °C a 8 °C

Ideales para transportar insulina sin abrir, que requiere mantenerse refrigerada:

  • Voyager Mini Refrigerador Portátil: Mantiene hasta 7 plumas de insulina refrigeradas entre 2 °C y 8 °C durante más de 30 horas sin electricidad. Conectado a un puerto USB, funciona de forma ilimitada. Ideal para vuelos largos, escalas o viajes fuera de red.
  • Nomad Nevera Portátil: Refrigera hasta 7 plumas de insulina sin necesidad de electricidad, gracias a su sistema pasivo de enfriamiento. Perfecto para trayectos medios o cuando no hay acceso a una fuente de alimentación.
  • Explorer Nevera de Viaje: Sistema versátil que permite refrigerar hasta 7 plumas de insulina por más de 52 horas sin conexión eléctrica. Combina refrigeración activa y pasiva. Ideal para viajeros frecuentes o destinos calurosos.
  • RxCoolers Mini Porta Insulina Refrigerado: Mantiene entre 2 °C y 8 °C durante hasta 30 horas sin electricidad y hasta 48 horas por debajo de 26 °C. Funciona también conectado por USB. Ideal para vuelos largos, excursiones y escapadas cortas.
  • RxCoolers Max Nevera de Viaje Eléctrica: Refrigera hasta 7 plumas de insulina entre 2 °C y 8 °C con control inteligente de temperatura. Protege del calor y del frío extremo. Ideal para viajes largos, climas extremos y múltiples tratamientos.

Estuches y bolsas que mantienen la insulina fría (debajo de 25 °C)

Más ligeros y compactos, están diseñados para insulina abierta o para trayectos en los que no se espera mucho calor extremo:

  • Chiller bolas térmica médica: Mantiene la insulina fresca hasta 45 horas gracias a su tecnología de refrigeración por evaporación, sin necesidad de hielo ni electricidad. Ligero, práctico y perfecto para viajar en avión
  • Rambler Termo enfriador: Estuche individual para mantener una pluma de insulina fresca durante 12 a 16 horas, según la temperatura exterior. Compacto, discreto y ideal para uso diario o trayectos cortos.

Te puede interesar: Viajar con Insulina internacional: Consejos Prácticos para Viajar con Insulina Internacional y Planificar Cambios de Horario

Preguntas Frecuentes Sobre Viajar con Insulina en Avión

¿Pasa la insulina por el escáner del aeropuerto?

Puedes pasar insulina por los controles de seguridad sin problema. Los escáneres de rayos X del equipaje de mano y los detectores de metales no dañan la insulina ni los dispositivos relacionados.

Pero si tienes dudas o prefieres evitarlo, puedes pedir que revisen tu bolsa manualmente. Solo tienes que avisar al personal de seguridad en el control.

¿Puedo llevar mi bomba de insulina en el control de seguridad?

Sí, pero no todas las bombas de insulina pueden pasar por los escáneres corporales, especialmente los que usan tecnología de ondas milimétricas (como los de cuerpo entero que ves en algunos aeropuertos).

Antes de viajar, consulta el manual de tu bomba o la web del fabricante para saber si hay restricciones.

Si no debe pasar por el escáner, informa al agente de seguridad y pide que te hagan un registro manual. Están acostumbrados y lo harán de forma respetuosa y rápida.

¿Qué pasa con los sensores de glucosa?

En general, los sensores de glucosa pueden pasar por el control sin problema.

Aun así, es recomendable revisar siempre las instrucciones del fabricante, ya que algunos modelos concretos podrían verse afectados por ciertos tipos de escáner.

Si el fabricante indica que no deben pasar por rayos X o escáner corporal, puedes pedir una revisión manual del dispositivo y mostrar la nota médica si la llevas.

¿Afecta el vuelo a los niveles de glucosa?

Sí, es bastante común que los niveles de glucosa cambien durante un vuelo, incluso si sigues tu rutina habitual.

Esto se debe a varios factores:

  • Cambios de horario (jet lag)
  • Estrés por el viaje
  • Presión atmosférica en cabina
  • Inactividad física durante el vuelo
  • Saltarse comidas o cambiar los horarios

Consejos prácticos para evitar problemas:

  • Mide tu glucosa más a menudo de lo normal.
  • Bebe agua con frecuencia (la cabina reseca mucho).
  • Ten siempre a mano glucosa o un snack con azúcar rápido (zumos, tabletas de glucosa, etc.).
  • Habla con tu médico antes del viaje si necesitas ajustar las dosis de insulina por el cambio de horario o destino.

¿Cómo inyectarse insulina durante el vuelo?

No hay ningún problema en pincharte durante el vuelo, siempre que sigas unas precauciones básicas:

  • Si usas pluma, purga la dosis antes de inyectar (es decir, presiona hasta que salga una gota) para eliminar posibles burbujas de aire que se forman por el cambio de presión en cabina.
  • Elige un momento tranquilo del vuelo, como después del despegue o durante la comida.
  • Si necesitas más privacidad, puedes usar una manta, una chaqueta o avisar a la tripulación. Están entrenados y suelen ser muy comprensivos.
  • Asegúrate de desechar las agujas usadas en un recipiente rígido o tu contenedor de agujas usadas hasta que puedas tirarlas correctamente.

📌 Puntos clave:

  • ✈️ Puedes llevar insulina y agujas en el avión, incluso si superan los 100 ml. Llévalas siempre en el equipaje de mano, bien protegidas y organizadas.
  • ❄️ Mantén la insulina fría durante el viaje con una nevera portátil aprobada. Usa refrigeración activa para insulina sin abrir y fundas térmicas para la insulina abierta.
  • 🗒️ Lleva tu receta médica y un justificante, sobre todo si viajas fuera de la Unión Europea. Algunos países pueden exigir documentación adicional.
  • 🛃 Informa al personal de seguridad si llevas bomba de insulina o sensor de glucosa (CGM). Puedes solicitar inspección manual si el fabricante desaconseja pasar por el escáner.
  • 📈 Controla tus niveles de glucosa durante el vuelo: hidrátate, lleva carbohidratos de acción rápida y ajusta tus dosis si cambias de zona horaria.

💬 ¡Nos encantaría saber de ti!

Si has viajado con insulina o estás por hacerlo, cuéntanos tu experiencia o deja tus preguntas en los comentarios. Ayudémonos entre todos a viajar con más confianza y seguridad.

📆 Historial de actualizaciones del artículo:Publicado originalmente: 15 de agosto de 2024

06 mayo 2025

Dejar un comentario

Por favor tenga en cuenta que los comentarios deben ser aprobados antes de ser publicados

The information presented in this article and its comment section is for informational purposes only and is not intended as a replacement for professional medical advice. Always consult with a qualified healthcare provider for any medical concerns or questions you may have.